El oro digital
Trump habla, Bitcoin explota: La barrera de los US$100.000 es historia tras un anuncio clave
Bitcoin superó los 100.000 dólares, impulsado inicialmente por el anuncio de un acuerdo comercial EE.UU.-Reino Unido por Donald Trump. Este ascenso se sustenta también en un flujo récord de inversión institucional vía ETFs, crecientes tensiones geopolíticas y la validación de Bitcoin como reserva de valor a largo plazo. Expertos coinciden en su resiliencia y valor intrínseco, influenciado tanto por factores macroeconómicos como por dinámicas propias del ecosistema cripto. Este hito refuerza su consolidación como un activo estratégico y estable en la nueva economía digital global, más allá de la mera especulación.
9 de Mayo de 2025

Bitcoin (BTC) ha experimentado un notable repunte, superando la barrera de los 100.000 dólares estadounidenses, alcanzando una cotización de 101.870 dólares. Este incremento, superior al 5% en 24 horas, se ha visto acompañado por el alza de otras criptomonedas relevantes como Ethereum, Solana, XRP y BNB, sugiriendo un optimismo generalizado en el mercado.
El aumento de Bitcoin por encima de $100,000 se debe a varios factores. Primero, la adopción institucional, con grandes inversiones en ETF, como los $45 mil millones de BlackRock. Segundo, políticas pro-cripto, especialmente tras la elección de Trump y nombramientos favorables.…
— Grok (@grok) May 8, 2025
El catalizador principal de este movimiento alcista parece ser el anuncio de un nuevo acuerdo comercial entre Estados Unidos y el Reino Unido, impulsado por el presidente Donald Trump. Aunque los pormenores aún están por revelarse, se anticipa que el pacto buscará una reducción significativa de las cargas arancelarias, revirtiendo la política proteccionista previa que incluyó gravámenes a importaciones británicas y aranceles a sectores como automóviles, acero y aluminio.
Expertos del sector, como los de la plataforma Lemon, atribuyen este auge a una confluencia de factores. Destacan un flujo récord de inversión institucional, evidenciado por la masiva captación de capital por parte de los ETF de Bitcoin, especialmente el gestionado por BlackRock. Esta entrada de capital institucional se traduce en compras directas de BTC, presionando su precio al alza por la dinámica de oferta y demanda.
Este renovado apetito inversor, que ha sumado miles de millones de dólares en pocas semanas, indica un punto de inflexión y la activación del llamado "FOMO" (miedo a quedarse afuera) institucional. Además, las tensiones geopolíticas, como las comerciales entre EE.UU. y China, incentivan la búsqueda de activos de refugio alternativos al sistema financiero tradicional, fortaleciendo la percepción de Bitcoin como una reserva de valor a largo plazo y un activo estratégico.
Julián Colombo, de Bitso Argentina, matiza que el anuncio de Trump es solo una pieza del rompecabezas. Si bien reconoce su influencia, subraya la resiliencia intrínseca de Bitcoin frente a otros activos, incluso dentro del ecosistema cripto. Sostiene que se está validando progresivamente la tesis de que Bitcoin posee un valor "per se", afectado por la macroeconomía pero también fuertemente influenciado por dinámicas propias del mundo cripto.
Desde esta perspectiva, la escasez programada de Bitcoin, su resistencia a la censura y su creciente reconocimiento institucional son pilares que auguran un futuro alcista. Sebastián Serrano, de Ripio, coincide en que superar los 100.000 dólares representa una especie de "vuelta a casa" para el mercado, alineándose con la percepción de la industria sobre el valor intrínseco de la criptomoneda. Destaca cómo las economías tradicionales enfrentan inflación y volatilidad, mientras Bitcoin muestra signos de "decoupling" y sus fundamentales se consolidan.
Este hito no es aislado; Bitcoin ya había alcanzado un máximo cercano a los 109.500 dólares en enero, coincidiendo con expectativas procripto en torno a la asunción de Trump que no se materializaron del todo, llevando a una corrección. El actual retorno por encima de los 100.000 dólares, tras un periodo de cotización inferior, refuerza la idea de que Bitcoin está trascendiendo su rol especulativo para consolidarse como un activo cada vez más estable y fundamental en la nueva economía digital y global.